Tanto te quise cabronazo
que me duele no quererte
me pregunto si te extraño,
solo a veces.
Hay días en que mis manos
se mueren por tocarte
con las mismas ansias que ahora
pagarían por matarte.
Mi boca, pozo de amargura
cuantas noches pasó llamandote
no sabes cuantas, hijo de puta.
Como una sanguijuela succionaste
mi sangre, mi vida, hasta mi sombra
dejaste mi alma en los huesos
y saliste a la caza de otra.
Cuando me miro al espejo veo
un gilipollas reflejado
que para ti fue pasado
en cuanto no hubo nada nuevo.
Sin embargo me jode pensarte
porque a diferencia de ti
yo supe como amarte
mientras te deshacías de mi.
Tanto te quise mamonazo
que detestarte me duele
en cuanto a si te recuerdo,
solo a veces.
No hay comentarios:
Publicar un comentario