martes, 18 de agosto de 2015

Parece felicidad

Nos hemos acostumbrado 
a desear los cuerpos
que no saben pensar

es tal vez por eso 
que se atrofia el cerebro

y siempre acabamos mal.


Que por presumir 
de unos labios bonitos
besamos al azahar


bocas que no saben
conjugar una frase 
mucho menos rimar.


No sabemos distinguir
entre amor y capricho
y por eso será


que siempre buscamos
nunca encontramos 
y seguimos en soledad.


Y yo reflexiono
pues el otoño
se acerca sin más


para atraparnos
en años cansados
sin ninguna piedad.


Que vivir la vida
no es sinónimo
de follársela


pues la buena compañía 
y los buenos momentos
nos vienen a dar


esas pequeñas cosas
que da sentido a la vida
y parece felicidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario